La salsa tamari es una salsa que se obtiene mediante la fermentación de un solo cereal. La salsa de soja tamari es, por lo tanto, una salsa a base de soja fermentada que se caracteriza por su intenso sabor umami.
Esta salsa tamari ahumada se elabora a partir de semillas de soja japonesa enteras, sin desgrasar, sal marina y harina de soja tostada. Este «tamari» se fermenta y envejece de forma natural durante dos largos años en barricas de cedro (kioke).
El papel del «koji» en la elaboración del «tamari» es tan importante como en la del miso (aunque el tipo de hongo koji es diferente). El «tamari», de sabor muy rico y maduro, desciende poco a poco de la cuba tras un afinado de dos años y, a continuación, se recolecta.
Alternativamente, el miso (mezcla de soja, agua y sal) se saca de la cuba y se coloca entre paños, en capas, y se prensa para obtener un tamari muy sabroso. Esta salsa tamari tiene el doble de umami que la salsa de soja estándar y es mucho más espesa. Se dice que la salsa de soja tamari nació en China, pero debe su popularidad a los artesanos japoneses.
La salsa de soja tamari ahumada, fermentada de forma natural, se elabora según un método de fermentación ancestral combinado con una técnica de ahumado occidental moderna. La salsa de soja tamari ahumada no contiene trigo (sin gluten), por lo que es apta para personas alérgicas al trigo.
El tamari ahumado es conocido como «el último condimento de moda en Japón». Tiene un sabor intenso y un aroma ahumado único y suave (gracias al uso de virutas de madera de cerezo). Nuestro artesano Aritaya tiene una patente en Japón por el método de elaboración de este producto.
Esta salsa tamari está garantizada sin aditivos, colorantes ni conservantes, sin OMG y es VEGANA. Nuestro artesano la recomienda como sustituto de la sal para condimentar carnes a la parrilla (ternera, cerdo, pescado, marisco), guisos, sashimis y sushis, tofu, mousses y ganaches de chocolate como ingrediente secreto.