Salsas japonesas

Los yakitori, tradicionalmente pequeñas brochetas de pollo (muslo, ajo, cuadril, piel, cartílago, hígado, corazón...) son uno de los platos favoritos de los europeos que viajan a Japón.

La salsa que se añade a los yakitori les da un sabor dulce y salado que gusta a todo el mundo. Nuestra salsa está elaborada con azúcar granulado, que proporciona un glaseado agradable, fragante y apetitoso.

La salsa Ohgon no aji se puede utilizar para una amplia gama de platos, desde carnes a la parrilla hasta guarniciones ordinarias, salteados y luego, como ingrediente secreto de currys, yakisoba y arroz salteado.

Yakiniku significa carne a la parrilla. La cultura alimentaria japonesa prohibió durante mucho tiempo el consumo de carne y sufrió profundos cambios durante el periodo Meiji (1868-1912).

La prohibición de comer carne se levantó con la llegada de la cultura occidental. El sukiyaki y otros platos de carne son representativos de este cambio, y se desarrollaron métodos de cocción especiales para dar sabor a la carne y eliminar su olor, a veces fuerte, haciéndola más sabrosa.

Sukiyaki es un plato tradicional japonés (se cree que se originó en la ciudad de Kobe a finales del siglo XIX) de la familia de los "nabemono" (plato único).

Sin embargo, otras versiones más rudimentarias que datan de principios del siglo XIX utilizan procesos similares para cocinar pescado, aves de caza y marisco.

Consiste en finas lonchas de ternera, puerros, setas shiitake y tofu. La ternera se asa a la parrilla y luego se hierve en una mezcla de salsa de soja y azúcar en una olla de hierro. Los demás ingredientes se comen después de la ternera, cocidos lentamente en una salsa llamada "Warishita".

La salsa más popular para acompañar carnes y verduras es el shabu shabu goma dare, una salsa rica en semillas de sésamo tostadas.

La salsa de acompañamiento, llamada shogayaki no tare, se elabora con jengibre rallado, en este caso de Kôchi. El sabor del jengibre realza delicadamente el arroz de acompañamiento.

Esta salsa caramelizada, rica, brillante y realzada con jengibre, marida a la perfección con la jugosidad y ternura del cerdo. También es un acompañamiento perfecto para el brócoli, las zanahorias y los puerros.

Esta salsa japonesa artesanal se elabora con caldo dashi de bonito seco, setas shiitake y algas kombu.

Los yakitori (yaki = a la parrilla, tori = pollo) son brochetas de pollo tradicionalmente asadas, compuestas por trozos de carne de todas las partes del pollo, como pechugas, muslos, piel, hígado y otros despojos.

La salsa Ohgon no aji se puede utilizar para una amplia gama de platos, desde carnes a la parrilla hasta guarniciones ordinarias, salteados y luego, como ingrediente secreto de currys, yakisoba y arroz salteado.

El tsuyu o mentsuyu es una base de sopa japonesa que se utiliza habitualmente en los platos de fideos soba y udon. Se utiliza como aromatizante en muchos platos, ya sean de carne, tofu o verduras. Este tsuyu es el resultado de una exhaustiva investigación para resaltar el aroma y el sabor de las verduras. El aroma y el umami de las verduras llenarán su boca mientras disfruta de su somen, sobas o udon.

Una de las salsas más emblemáticas de la cocina japonesa para sus barbacoas o "yakiniku".

Una salsa imprescindible para laquear y cubrir todos tus pescados y carnes asadas.

Esta es la tradicional salsa para cubrir la anguila japonesa “unagi”. Ideal para barbacoas.

Esta salsa tonkatsu fermentada 3 años nace como una de las consecuencias del terremoto.

Esta salsa es un producto básico de los populares restaurantes japoneses de yakiniku. Es una salsa barbacoa dulce a base de soja. El ajo, el jengibre y la pimienta roja le dan un toque especial. Ideal para condimentar cerdo, ternera y verduras.