Todas las uvas se cultivan según el sistema de posicionamiento vertical de los brotes (VSP). Las variedades de uva incluyen merlot, kai blanco (un híbrido de koshu y pinot blanco), muscat bailey A, chardonnay y fuji no yume (un híbrido de yamabudo y merlot). Producen vino a partir de un total de 40 toneladas de uva procedente de su propio viñedo y de granjas locales con contrato. Todas las etapas de la vinificación, desde el prensado hasta la fermentación, pasando por el envejecimiento, el embotellado y el etiquetado, se llevan a cabo en un espacio compacto de 80 tsubo (aproximadamente 265 m²).
Además de las cubas de acero inoxidable, también se utilizan cubas esmaltadas, vestigios de la época en que el vino se elaboraba en una fábrica de sake. Para los vinos tintos como el Muscat Bailey A, estas cubas esmaltadas permiten alcanzar temperaturas de fermentación más altas, una técnica inspirada en la elaboración del sake, que da un color intenso y magnífico. Las grandes cubas esmaltadas de 3,5 toneladas pueden contener grandes cantidades de uva, que fermentan naturalmente bajo su propio peso sin ser prensadas después de ser despalilladas y estrujadas.
El envejecimiento también se realiza en barricas de vino tradicionales, pero las barricas de whisky proceden de la destilería Chichibu, que produce uno de los whiskies japoneses más reputados, Ichiro's Malt. El uso de diferentes barricas de whisky (como Peated Cask, Cherry Cask, Bourbon Barrel, Mizunara Cask, etc.) permite obtener vinos con características variadas. Tras aproximadamente un año de envejecimiento, el vino desarrolla un sabor interesante. Además, en ocasiones se pueden utilizar virutas de madera de Mizunara, tostadas in situ, para realzar el aroma. La finca produce vino en colaboración con agricultores locales y sigue recibiendo cada año unas 30 toneladas de uva cultivada en Chichibu. Chichibu es un destino turístico, por lo que los agricultores disfrutan de ingresos estables gracias a la venta directa de diversos productos, como uvas de mesa, arroz y setas shiitake.
Esta estabilidad y diversidad han contribuido a sostener la producción de vino. Además de la uva, la bodega también elabora vinos a partir de frutas locales como el kabosu, un cítrico, y las fresas. Mantiene estrechos vínculos con los agricultores locales, a los que incluso suministra orujo de uva para utilizar como abono. Debido a su ubicación rural, las bodegas de Chichibu se han enfrentado a una escasez de mano de obra, especialmente para las tareas agrícolas. Para remediarlo, a principios de la década de 2000, la bodega Usagida se asoció con Sakura Farm, un centro local de ayuda a personas con discapacidad, con el fin de ofrecerles formación profesional y ayudarles a ser autónomos, creando así un modelo de colaboración entre la agricultura y el sector social.
La mayoría de los miembros del centro son personas enérgicas y capaces de realizar tareas más complejas que el simple envasado de verduras. De hecho, han mostrado un gran interés y motivación por el trabajo en la bodega, incluso en los viñedos y en las tareas más minuciosas. En el futuro, la bodega desea seguir produciendo el «Chichibu Nofuku Renkei Wine», un vino fruto de la colaboración entre la agricultura y el sector social, con el fin de reforzar aún más su contribución a la comunidad local. La bodega Usagida diseña sus etiquetas de vino con el tema «capturar el espíritu de Chichibu». En ellas se destacan imágenes como el «mar de nubes de Chichibu», un espectáculo natural único de la región, que pone de relieve su clima, sus paisajes y su atractivo turístico. El objetivo es que la etiqueta no solo refleje la identidad de Chichibu, sino que también sirva como recuerdo local y fomente las visitas a la región.
Desde 2019, la bodega también ha introducido etiquetas con motivos Chichibu Meisen, un diseño textil tradicional local, lo que subraya su compromiso de destacar Chichibu en cada botella. El propietario, Kazuhiko Fukada, nació y creció en Chichibu en una familia que se dedicaba a la sericultura y también cultivaba uvas como la Campbell Early. Inspirado por los amigos de su padre y otros viticultores locales, siempre tuvo el deseo de producir vino a partir de uvas cultivadas en Chichibu. Una visita al valle de Napa, en Estados Unidos, le inspiró profundamente y, hace unos 30 años, mientras regentaba una tienda de vinos y licores, decidió lanzarse a la industria del vino. Al principio, encargó la vinificación a una cervecería de sake cercana, pero después de ganar varios premios en concursos de vinos, decidió abrir su propia bodega y viñedo.
Así nació Domaine Usagida en 2015.