De hecho, este té se cultiva en altitud (a 400-500 metros) y sin sombra.
Además, las diferencias de temperatura entre el día y la noche son importantes y el aire es muy puro.
Este té no se fermenta, se tuesta, lo que adquiere un color marrón.
Las hojas utilizadas para su elaboración son de cosecha tardía.
Cuando se infunde, este té se vuelve de color marrón claro.
En boca es ligeramente aterciopelado y ofrece sutiles notas amaderadas.
La hojicha es baja en taninos y cafeína y, a menudo, se sirve como bebida en las comidas de los hospitales japoneses. Es un té apto para niños.
Recomendamos consumirlo al final de las comidas grasientas, muy sabrosas o antes de acostarse.
Preparación:
- - 13 cl de agua por cada 3 g de té
- - Temperatura del agua: 80 °C
- - Tiempo de infusión: 30 segundos